Pocos días después que La Xiqueta se mudara de casa y se viniera a vivir conmigo me vino a la memoria por asociación de ideas la película “La extraña pareja”. Y cuánto más tiempo pasa más nos veo como a los protagonistas de dicha película. Es más, si creyera en los viajes en el tiempo yo aseguraría que Neil Simons vino a este nuestro presente, se plantó aquí y viéndonos a las dos en nuestro día a día regresó al pasado con un guión bajo el brazo al que evidentemente le sacó partido, primero con su obra teatral y luego con el guión para la película de Gene Saks.
No es que yo sea exactamente como Félix – el personaje -, ni desde luego tengo la cara de Jack Lemmon; y La Xiqueta no tiene el agrio carácter de Oscar y claro tampoco la cara de Walter Mattahu, pero en lo que respecta al orden y limpieza. …Es que es igual.
Yo, lo admito, soy extremadamente ordenada, en mi casa todo está siempre en su sitio. Cada cosa, cada enser, tiene un lugar específico – caja, estante, cajón o armario - dónde se guarda. Es más, dentro de la mayoría de los armarios coloqué cajoncillos a medida y hasta les pegué con Loctite un letrerito que por supuesto imprimí después de elegir un tipo de fuente agradable a la vista, tamaño adecuado para su fácil lectura y un bonito color, para que quedara bien claro tanto para mí como para cualquiera cuál era su contenido exacto.
Por ejemplo mi botiquín es una cajonera – el botiquín ese que te regalan en la mutua lo tiré a la basura ya que, como diríamos Raúl y yo, “Cero usabilidad” – cuyos cajones están perfectamente diseñados para poder encontrar en el menor tiempo posible lo que se necesite. Y como sé que la gente que habita mi casa, sea de continuo o temporalmente, son muy despistados y olvidadizos, por si necesitaban algo y yo no estaba – a veces aún estando me llamaban y me hacían subir - les coloqué sus respectivos letreritos en color azul eléctrico, fuente Tahoma y tamaño 16. Vamos, un diez en usabilidad que me pondría Raúl si todavía estudiara con él. Y si no me creéis mirad como están separados los avíos y medicamentos:
· Analgésicos
· Digestivos
· Antibióticos
· Sintomáticos
· Heridas – éste cajón lo hice más grande porque el alcohol y el agua oxigenada abultan mucho y encima están las tiritas, el Betadine, el algodón, etc
· Auxiliares – aquí están cuidadosamente instalados, las tijeras, las muñequeras, los dos termómetros (el de mercurio y el digital), las pinzas, guantes de latex, etc
· Otros – aquí es dónde pongo lo que no sé dónde meter, pero desde luego debe ubicarse en un botiquín.
Y así en todos los sitios destinados a guardar: la despensa, el armario de herramientas, el de la limpieza, etc. Bueno, no tanto, sin exagerar que no en todos los contenedores y cajones tengo letreritos.
La Xiqueta en cambio es todo lo contrario. Adentrarse en su habitación es para mí una auténtica tortura. Ha habido veces que al entrar, ya parada en la puerta me quedaba con la boca abierta del espanto y entonces ella me gritaba:”No mires, no mires” en su afán por tenerme feliz y en ese temor que debe tener de que me de un colapso el día menos pensando.
Al principio le decía algunas cosillas, una riñita vamos, pero ella ponía esa carita de perrito abandonado y claro acababa abrazándola y dándole besos en vez obligarla a que recogiera el albornoz y lo colgara en su perchita del baño – la segunda por la derecha - o colocara los siete pares de zapatos esparcidos por cama y suelo en el zapatero.
Ahora ya no le digo nada - bueno casi nada - porque además también sé que por su parte, al verse las cosas de forma inversa, debe ser ella la que sufra ante lo que para ella será mi exasperante manía por el orden.
Ya lo dije, igual que en la película.
La diferencia está en dos cosas:
1: Nosotras al fin hemos llegado al siguiente acuerdo: ella intenta no desordenar las estancias compartidas de la casa y yo no digo absolutamente nada respecto al estado de su habitación sea cual sea éste.
Además he visto que es fácil, sólo tengo que, antes de penetrar en su alcoba, relajarme, respirar profundamente, contar hasta tres y al entrar intentar dirigir mi mirada sólo a ella. ¿Acaso hay algo más bonito?
2 : Nosotras nos queremos mucho más que Oscar y Felix se querían. Tanto nos queremos que todas nuestras manías, defectos y otros fallos, vicios o sombras, se van como todo lo inútil que hay en mi casa: a la bolsa de la basura - eso sí, bolsa de basura verde manzana, perfumada y antibacteriana, que se guarda junto a las demás en el segundo cajón empezando por arriba del armario de productos de limpieza –
10 comentarios:
Jajajaja...me hace gracia ese afán por el orden!!!
Y me hace más gracia el que tu gran amiga sea la antítesis total!!
Me recuerda a mi madre con mi hermana eso de la habitación....
Espero que las dos esteis muy a gustito y que la convivencia os ayude.
Besos
Debería empezar el comentario como xiketä: ja, ja, ja, porque también soy maniático por el orden, cosa de la que mi analista, Susana, trata de disuadirme, inútilmente, hasta ahora.
Pero, finalmente, me ha confesado, que ella también lo es, así que mira cómo son las cosas, pues me dice: no trates de convencer a nadie de ser ordenado!!!
Me olvidaba: ¿qué pasó con tu primo? ¿Apareció?
Besos. Adal.
Bueno bueno bueno.. madre mía! yo soy una maniática del orden, vamos que me gusta tenerlo todo, como dios manda, y ni te digo eso de tener botiquín! de tó, jaja, de tó tengo, una pastillera vamos! si es que, más vale prevenir,no?
Lo he pasado genial,como siempre, un beso guapa!.
Yo no soy desordenada, lo que pasa es que tengo un orden abstracto
Ains que poco me entiendes
xDDD
Xiketä La verdad es que es gracioso. Hasta nosotras mismas nos reímos.
Besos
Adal comprobado está que no se puede convencer a nadie ni de que sea más ordenado ni de que lo sea menos. De todas formas es algo tan sin importancia que a mí me da igual serlo y que los demás no lo sean. En cuanto a mi primo. Chico, no he sabido más de él. Sigue el misterio.
Besos.
Tormenta: Claro, el totiquín es de una de las cosas que siempre hay que tener lleno: gotas, aspirinas, pomadas, tiritas, gasas..no sé como la gente no lo ve. XDD
Besitos
La xiqueta: ¿Orden abstracto? Tú si que eres abstracta. No te digo lo que hay..XDDD
Es bueno que de común acuerdo hayan acordado el tema. No está tan mal que los lugares en común sean fieles a tu estilo (maníaco-ordenado) y su habitat esté en su abstracto desorden. :)
Un beso para las dos!
Bueno. Pero debemos AHONDAR en esta relaciòn.
Quien puede echar a quien?
Evidentemente, Sibe, corres con ventaja.
saludos
Gaucho: qué va, la muy zalamera me hizo prometer que jamás la tiraría de casa. ¿Te lo puede creer?
pensé que era Xiketa, nuestra amiga blogera, esta compañera y he leído su comentario, entonces es otra.
bueno, Jajaja. Me das una lección de orden, el mío es medio. Pero estás incumpliendo la norma de callar como se encuentra su habitación ....
Me alegro de q vuestra convivencia sea tan positiva.
Un abrazo, estuve desconectada este verano, pero ya ando por aquí otra vez.
Yuria Sí, tengo para mi suerte dos xiqutäs : Xiketä y La xiqueta.
Seuro que la blogera que conocemos ambas, no es tan desartre como ésta. Pero ya ves, nos llevamos formidable.
Feliz veraneo. Hala la que te has pasado por ahí. XD
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